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domingo, 29 de septiembre de 2013

Semillas de Muérdago No 47: ¿PROBLEMAS?, UNA ILUSIÓN DE LA MENTE


       Si Ud. concentra toda su atención en el Ahora, en lo que está haciendo y desea verificar cuales son sus problemas en este exacto momento. No obtendrá respuesta alguna, porque es imposible tener problemas cuando toda su atención está por completo en el Ahora. Tal vez exista alguna “situación” que Ud. necesite resolver o aceptar. ¿Porqué transformar eso en un problema?

      La mente inconscientemente, adora problemas porque ellos pueden ser de varios tipos. Eso es anormal y enfermizo. La palabra “problema” significa que estamos enfrentando mentalmente a  una situación, sin que exista un propósito real o una posibilidad de actuar en el momento, y también que estamos haciendo de ella una parte de nuestro sentido de Yo Interno. Nos envolvemos tanto con nuestra “situación de vida” que perdemos el sentido real de la vida, o del Ser. O estamos sobrecargando la mente con el peso insano de una centena de cosas que solo resolveremos  en el futuro, en vez de focalizar nuestra atención sobre una cosa concreta que podemos hacer ahora, en este momento.

       Cuando creamos un problema, creamos sufrimiento. Por eso es necesario tomar una decisión simple: No importa lo que suceda, no voy a crear para mi más sufrimiento ni problemas.

      Es una elección simple pero radical. Nadie hace una elección de ese tipo a menos que se encuentre sofocado por el sufrimiento.   No se consigue llevar  adelante una decisión de ese tipo sin  confiar en el Poder del Ahora. Si Ud. no crea más sufrimiento para si mismo, tampoco estará creando para los demás. De este modo dejará de contaminar  nuestro planeta, a las personas de su entorno, su propio espacio interior y la psique humana colectiva con la negatividad de la creación de problemas.

      En caso de aparecer una situación a la cual tenga que enfrentar ahora mismo, su acción va a ser más clara y objetiva, si consigue percibir el momento presente. Tendrá más posibilidades de tener éxito y no será una reacción procedente del condicionamiento de su mente con el pasado o futuro, pero sí, una respuesta intuitiva a la situación. En situaciones en que la mente condicionada por el tiempo habría reaccionado, Ud. va a constatar ser más eficaz  el NO hacer nada. Solamente céntrese en el Ahora.

     Y para demostrar que Ud. se deja dominar por el tiempo psicológico creando problemas a sí mismo, experimente este criterio simple. Pregúntese: ¿Existe alegría, naturalidad y liviandad  en lo que estoy haciendo?  Si no existiera, es porque el tiempo esta encubriendo el Momento Presente y Ud. esta percibiendo la vida como una carga o una lucha.

      La ausencia de alegría, naturalidad o liviandad en lo que estamos haciendo no significa necesariamente que necesitemos cambiar lo que estamos haciendo. Tal vez baste solo cambiar el como. El “COMO” es siempre más importante que el “QUE”  estoy haciendo. Verifique si Ud. puede dar mucho más atención al Hacer en lugar de los Resultados deseados a través del Hacer. Dé su total atención para lo que el momento le apresenta. Eso implica que Ud. aceptó completamente lo que ES, porque no se puede dar atención completa a alguna cosa y al mismo tiempo, resistirse a ella.

      Al respetar el momento presente, toda la lucha e infelicidad se disuelven, y la vida comienza a fluir con alegría y naturalidad. Al actuar con la consciencia del momento presente, todo lo que hagamos tendrá  un sentido de calidad, cuidado y amor; así sea una acción  muy  simple.

      No se preocupe con el resultado de su acción, basta dar atención a la acción en sí. El resultado surgirá espontáneamente. Esa es una valiosa práctica espiritual. Cuando cada célula de nuestro cuerpo está tan presente, que vibran con la vida, y cuando conseguimos sentir esa vida a cada momento (sea cual sea) con la alegría del Ser, podemos decir que estamos libres del tiempo. Librarse del tiempo es librarse de la necesidad psicológica tanto del pasado como del futuro, Eso representa la TRANSFORMACIÓN MÁS PROFUNDA DE LA CONSCIENCIA que Ud. pueda imaginar.
Después de los primeros destellos  del estado atemporal de la consciencia, pasamos a vivir en un vaivén entre la dimensión del tiempo y la presencia. Primero Ud. comienza a percibir que su atención está raramente en el Ahora. Saber que Ud. NO está presente ya es un gran avance. Saber simplemente eso, ya es Presencia, a pesar que al inicio esto suceda por espacio de  pocos segundos en el tiempo del reloj, antes de desaparecer nuevamente.

      Después, con una mayor frecuencia, Ud. consigue dirigir el foco de su consciencia para el momento presente, y no para el pasado o el futuro. Todas las veces que Ud. percibe que perdió el Ahora, percibirá ser capaz de permanecer en él por períodos cada vez más prolongados en la perspectiva externa del tiempo del reloj.

      Por lo tanto; antes de ser capaces de establecernos con firmeza en el estado de Presencia, oscilamos periódicamente, de un lado para el otro, entre la consciencia y la inconsciencia, entre el estado de Presencia y el estado de identificación con la mente. Perdemos el Ahora varias veces, pero retornamos a él. Por fin, la Presencia del Ser (de nuestro Ser Interno) se torna un estado predominante, lleno de paz, alegría y entusiasmo natural por la vida, ese es el fin supremo de toda práctica espiritual real y verdadera que nos permitirá tener una auténtica Vida plena y feliz.


lunes, 9 de septiembre de 2013

Semillas de Muérdago No 46: LIBERÁNDOSE DEL TIEMPO SICOLÓGICO




      En los artículos anteriores de este ciclo de crecimiento espiritual, vimos que a nuestra mente normalmente le gusta “volar” en el pasado o en el futuro (denominados como  tiempo sicológico), que no nos permite centrar nuestra atención a lo que estamos haciendo exactamente en este momento, “Aquí y Ahora”, creando por lo tanto una bola de nieve de pensamientos continuos, involuntarios y compulsivos, que van a provocar  ansiedad y muchas veces sufrimiento en la persona que no consigue librarse de ese esquema del tiempo psicológico. 

      Veamos por tanto; ¿Cómo se produce esa enfermedad y sufrimiento? El hecho de siempre estar pensando en el futuro, en los problemas que todavía no llegaron, crea sufrimiento y agonía. Al estar continuamente recordando hechos del pasado sean estos buenos recuerdos y peor todavía si son  ingratos, eso niega el momento presente, único momento donde podemos aplicar todo nuestro poder y energía para sentir el placer de la vida, la felicidad. Así, podemos observar que el proceso de pensamiento involuntario y compulsivo, esconde la  verdadera naturaleza y esencia de nuestro SER interior (que es atemporal y eterno). Ese tipo de pensamiento nos quita  “tiempo” importantísimo para dar atención a lo que estamos haciendo en este exacto momento. 

      Entiendo que el tiempo es importante en la vida cotidiana, del mundo físico en que vivimos, por lo tanto; debemos aprender a usar ese “tiempo del reloj” para los fines prácticos de la vida, para cumplir una cita con el dentista, para recordar el cumpleaños de una persona querida, para cumplir con el pago de una deuda, etc. Pero debemos también aprender a regresar inmediatamente a percibir el momento presente y actual, tan luego que los asuntos prácticos hayan sido resueltos. Así no habrá acumulación de “tiempo psicológico”, que es la identificación con el pasado y una proyección compulsiva hacia el futuro.

      Tal vez sea difícil reconocer que el tiempo es la causa de nuestro sufrimiento y problemas. Creemos que ellos son causados por situaciones específicas que suceden en nuestras vidas, efectivamente eso es verdad desde un punto de vista convencional. Pero si  no nos enfrentamos con la disfunción básica de la mente (el apego al pasado y al futuro y la negación del momento presente), los problemas solo mudarán de figura.
Si todos nuestros problemas o causas identificadas de sufrimiento e infelicidad, fueran “milagrosamente” solucionadas el día de hoy, sin aprender a ser más presentes y conscientes; luego nos veríamos envueltos en otra serie de problemas y causas de sufrimiento muy semejantes a las anteriores, como una sombra que nos sigue a donde quiera que vayamos. En último análisis, el único problema es la propia mente, limitada por el tiempo sicológico, que niega el momento presente. No hay salvación dentro del tiempo, Ud. no puede liberarse en el futuro.

      La presencia es la clave para la libertad, por lo tanto Ud. solo  puede ser libre AHORA, en este momento; porque permite que nuestra vida sea una aventura, con capacidad de sorprenderse de las cosas más simples, de admirar las flores en el camino, de percibir la alegría, belleza y el milagro de la vida a cada instante en que vivimos y que se revela en todo lo que tenemos a nuestro alrededor.  Por lo tanto el único lugar donde puede ocurrir un cambio verdadero para tener una vida sin sufrimiento e infelicidad, esta donde el pasado puede disolverse, es decir en el  Ahora. Aprendamos a vivir, sentir y aceptar con alegría el momento presente, sea cual sea su naturaleza.